¿No tienes la sensación de que este verano está siendo raro, muy raro?.
Y no hablo de la rareza de ir por la calle y ver a todo el mundo con mascarilla.
O de ver cómo la gente te esquiva por la calle (sobre todo si eres mayor).
Aún no me acostumbro.
Cada semana hablo con mucha gente (por teléfono).
Amigos que me llaman para saber qué tal estoy, cómo va UCEPSA, qué he hecho el fin de semana…
Les cuento y les pregunto.
Escucho grandes éxitos y grandes fracasos.
En estos días de coronavirus prácticamente no hay casos intermedios.
Noto que quien me cuenta éxitos es gente que se ha acostumbrado y adaptado, aparentemente sin problemas, a estos tiempos tan complicados.
Llevan mascarilla e hidroalcohólico como quien lleva monedas en el bolsillo.
Pero me llama poderosamente la atención que prácticamente nadie sigue igual que antes del virus.
O están facturando más que antes o menos.
Nadie me ha dicho que siga facturando lo mismo.
Y esto me hace pensar mucho.
Quiero saber dónde está el éxito y dónde el fracaso.
Cuando lo sepa a ciencia cierta, te lo contaré por aquí.
Lo que tengo claro es que trabajar duro, trabajar con ilusión, formarte continuamente (con libros, internet o con la vida misma), levantarse cada día con ganas de ponerte a trabajar y aderezarlo con cariño a tus clientes ayuda mucho, muchísimo.
Así lo he hecho siempre, a lo largo de mi vida laboral y en UCEPSA así seguimos haciéndolo.
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