En el email de hoy seré breve.
Te propondré algo interesante.
¿Cuántas veces he oído a trabajadores hablar mal de su jefe, decir que es un inútil, que no sabe hacer nada, que es un tal y un pascual… etc.?
Yo, muchas.
Incluso lo he hecho.
Así que te quiero proponer un ejercicio muy simple:
Intenta pensar cómo te comportarías si fueras tu compañero.
Tu jefe.
El dueño de tu empresa.
Piénsalo con calma.
Durante un día observa a esa persona; piensa cómo reaccionarías en determinados momentos si fueras él; piensa en lo que hace, cómo hace y cómo lo haríais tú.
Seguramente nos daremos cuenta de muchas cosas:
– Infravaloramos las tareas de los demás (solución: ayudar en el trabajo a nuestros compañeros).
– Valoraremos el tiempo de los demás (solución: optimizar el tiempo de nuestras tareas y del tiempo que “molestamos” a nuestros compañeros y/o jefes).
Empaticemos.
Empaticemos con nuestros jefes y compañeros.
Nos ayudará a tener mayor perspectiva y ver cómo funciona nuestra empresa.
Dije que iba a ser breve.
Pasa una gran semana.
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